Terapia cráneo-sacral y LSE

La terapia craneosacral es una técnica respetuosa y no invasiva que ayuda a devolver el equilibrio a nuestro organismo. Utiliza un contacto ligero para examinar el sistema fascial y el movimiento de los fluidos dentro y alrededor del sistema nervioso central (impulso rítmico-craneal) aliviando una variedad de síntomas relacionados con el sistema nervioso central y medular como: neuralgia, dolor crónico, fibromialgia, esclerosis, estrés post-traumático y emocional, migrañas, fatiga, problemas de sueño, etc. También ofrece numerosos beneficios en el tratamiento de trastornos de aprendizaje, hiperactividad, autismo y trastornos de conducta. A través de la colocación suave de las manos se libera el tejido conectivo del cuerpo, o fascia, y se activan los procesos naturales de autorregulación, autocorrección y autocuración inherentes del cuerpo estimulando el sistema inmunológico. Como tratamiento preventivo estimula la inmunidad y aporta un mayor equilibrio y bienestar físico y emocional. La terapia se puede utilizar tanto en niños como en adultos.

Gestación, embarazo y parto

La terapia craneosacral y la liberación somato-emocional en madres y bebés ayuda a liberar memorias o quistes energéticos alojados en el cuerpo durante la gestación y el parto. Estas memorias son bloqueos energéticos, emocionales o físicos que condicionan, a un nivel muy profundo e inconsciente, el desarrollo del bebé y la vida del adulto. La huella emocional en la memoria celular y en los tejidos del recién nacido durante la gestación y el parto (cesarea, forceps, ventosa, etc.) supone, tanto para el bebé como para la madre, un trauma que necesita ser atendido, escuchado y liberado con amor y presencia.

Bioenergética y respiración

El análisis bioenergético, también conocido como psicoterapia bioenergética o simplemente bioenergética, es una psicoterapia psicodinámica que trata los fenómenos somáticos (corporales), psíquicos, emocionales e interpersonales (relaciones) como parte de un todo unitario. El principio fundamental del análisis bioenergético es que cuerpo y mente se influyen mutuamente, así las emociones y los sentimientos reprimidos en la infancia quedan grabados en nuestras memoria celular generando síntomas en el individuo y afectando a su relación consigo mismo y con los demás en la edad adulta.

Muchos patrones de comportamiento tienen su origen en las vivencias de la infancia, los mecanismos de defensa que desarrollamos de niños para gestionar nuestras emociones y hacer frente a las experiencias vividas (rechazo, abandono, conflicto, violencia, falta de presencia, etc.) se alojaron en nuestro cuerpo y en nuestra psique a un nivel muy profundo e inconsciente generando bloqueos energéticos, emocionales y físicos, dificultando nuestras relaciones e impidiéndonos vivir plenamente nuestro potencial energético.

“Respiramos tal como vivimos y vivimos tal como respiramos.” - Leonard Orr

Esta relación entre cuerpo y mente hace que en la práctica se trabaje con el cuerpo además de con el lenguaje. El enfoque verbal parte de los relatos del cliente, prestando atención no sólo a sus palabras sino también a los matices emocionales y las reacciones corporales correspondientes (postura, movimientos, mirada, voz, respiración, etc.). El enfoque corporal profundiza en la respiración e incluye técnicas corporales (postura, movimiento y movilidad, etc.) y de manipulación física (tacto) que estimulan la expresión emocional espontánea de los sentimientos del paciente, buscando eliminar sus bloqueos físico-emocionales y llevar al paciente a una reflexión consciente.

El objetivo es restaurar el equilibrio emocional y afectivo del paciente trayendo consciencia a sus bloqueos y condicionamientos, liberándolos y canalizando esa energía para ayudarle a superar miedos y emociones reprimidas (ira, rabia, frustración, pena, tristeza, dolor, etc.) para así poder resolver posibles dificultades emocionales y aprender formas nuevas y más satisfactorias de relacionarse con uno mismo y con los demás.

Aquatantra y terapia en agua

Aquatantra es la fusión de diferentes técnicas y herramientas que he aprendido y llevo trabajando desde hace más de 16 años. Todo el conocimiento que me ha llegado del Tantra, que es mucho más antiguo de lo que nos podemos creer, la escucha sutil y suave de la terapia craneosacral, la reconexión con tu respiración a través del rebirthing, la liberación somato emocional de las memoria que se quedan guardada en los tejidos y en las fascias, más todo el trabajo energético que llevo aprendiendo durante estos años, junto con la terapia sistémica de constelaciones familiares, me han llevado a traer todo este conocimiento al agua.

“Si hay magia en este planeta, está contenida en el agua.” - Loran Eisely

El agua tiene memoria, es portadora de una memoria inteligente. El agua es una portadora de consciencia que reacciona ante la oración, la música, los pensamientos, la meditación, a palabras escritas, ante todo esto el agua cambia su estructura, tiene la capacidad de modificar su estructura molecular. Ahora teniendo en cuenta todo esto, y que nuestro cuerpo está formado por el 70% de agua, no es fascinante darse cuenta cómo podemos aliviar muchísimas de las dolencias que tenemos de nuestras memorias y de cómo podemos modificar nuestro cuerpo en función de esto.