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"El propósito más profundo en la vida es ser amor".
David Deida

El tantra hace referencia a dos conceptos básicos, que según las diferentes corrientes pueden ser nombrados de diversas maneras: Shiva y Shakti, masculino y femenino, Yin y Yang, consciencia y energía, materia y espíritu, etc. Sea como sea, estamos hablando de la polaridad, de la supuesta dualidad de los opuestos. El Tantra del Origen nos trae la visión y la unión de todas esas enseñanzas, no sólo para entender nuestro cuerpo y la vida en la tierra, sino también para expandir nuestra consciencia más allá del tiempo y del espacio. Es la alquimia donde la dualidad se disuelve y sólo existe El Uno. Esta alquimia sólo es posible a través del amor, el amor es el camino a la unidad. Solamente a través del amor se puede lograr esa Unión Sagrada entre cuerpo y espíritu.

El cuerpo es el envase donde nuestro ser debiera habitar de manera natural, fluida y orgánica, pero estamos tan heridos y acorazados que nuestro verdadero ser y su energía no tienen espacio para moverse libremente a través de él. Así que actuamos y nos relacionamos en la vida sin consciencia ni presencia desde muchos lugares que no son nuestro verdadero ser. Tomamos decisiones inconscientes, desde lugares de necesidad, carencia y miedo, basadas en experiencias pasadas que dejaron una fuerte impronta en nuestro cuerpo y en nuestra psique a un nivel muy profundo e inconsciente. Se requiere de mucho valor, voluntad, aceptación y autoestima para abrazar nuestras heridas, miedos y limitaciones y liberarnos de ellos con amor y presencia.

El Tantra del Origen nos ofrece un camino que, poco a poco y con la ayuda de diferentes técnicas y herramientas, nos permite ir liberando aquellas memorias, condicionamientos y creencias que bloquean el fluir de nuestra energía vital y que nos impiden vivir desde el ser. Así, una vez libres, regresaremos a nuestro ser en origen, recuperando nuestra inocencia divina y volviendo al estado natural de inocencia, amor, alegría y unidad; y crearemos el cielo en la tierra, en armonía, paz y amor, como fue en el origen de los tiempos.

“Nada existe que no sea divino, lo sepas o no; esto no importa en lo que concierne a tu divinidad. Si tú lo sabes, entonces te conviertes en Existencia, gozo; si no lo sabes sigues sufriendo, pero eres divino. Aunque duermas, aunque ignores, eres divino. Incluso la piedra es divina, ignorante de sí misma. La Existencia es divina.”
Osho